Planta del incienso: guía básica de cultivo

Una planta que nos envuelve fácilmente en el ambiente navideño por su historia es, sin duda, el incienso. Una planta sencilla de cultivar y que tiene una alta presencia en el cultivo en macetas de todos los huertos urbanos.

En España, el incienso es una planta bastante reconocida, fácil de cuidar y muy vistosa como ornamental. Es por eso que nos resultaba imprescindible dedicarle un espacio en nuestro blog a su cultivo.

Os vamos a contar las claves más importantes de su cultivo para que no tengas ninguna duda en comprarla en cualquier vivero o tienda de jardinería. Y si te atreves, por su puesto también tienes la opción de multiplicarla a partir de esqueje. ¿Te animas?

Características de la planta del incienso

Nada tiene que ver la quema del incienso con la planta, pero si en cuanto aroma. El incienso que tradicionalmente se quema proviene de resinas principalmente vegetales (cedro, ajenjo, sabina real, Boswellia, etc.).

Sin embargo, no hace falta acercarse mucho a las hojas de la planta del incienso para notar ese embriagador aroma que nos recuerda al incienso de quema, ya que comparten mucho de los extractos vegetales utilizados.

Características principales:  planta herbácea y perenne de porte colgante. Conservará sus hojas durante todo el año, siempre que se cultive en zonas sin excesivo frío.

Época de floración: floración durante el verano, emitiendo flores de tamaño pequeño y color violeta o blanco a partir de espigas.

Taxonomía

OrdenMalvales
FamiliaLamiaceae
GéneroPlectranthus
Especie Plectranthus coleoides

Principales especies de incienso

Realmente el concepto de planta de incienso se atribuye a la principal representante de la familia, cuyo nombre científico es Plectranthus coleoides. Sin embargo, existen variables que pueden ser confundidas por esta planta y también clasificadas vulgarmente como «planta del incienso».

Sin embargo, la mayoría de ellas tienen diferencias significativas en sus hojas, siendo Plectranthus coleoides la que ofrece esa magnífica mezcla de colores verde y blanco en sus hojas.

  • Plectranthus verticillatus: una de las más conocidas dentro del género Plectranthus, reconocida por todos como planta del dinero.
  • Plectranthus saccatum: planta de tipo rastrero con hojas de tamaño pequeño y color verde intenso.
  • Plectranthus vehrii: hojas pequeñas y ovaladas con un verde color menta y tallos violáceos, muy utilizada como ornamental, especialmente en macetas colgantes.
  • Plectranthus oertendahlii: una planta con fantásticas opciones para cultivar en maceta como ornamental, con muchas subvariedades totalmente diferentes, pudiendo tener hojas amarillas (subv. Lime Light) o bien hojas de tipo grisáceos más pequeñas, la más habitual.
  • Plectranthus neochilus  ‘Fuzzy Wuzzy’: forma una alfombra de follaje gris verdoso que cubre el suelo con márgenes de hojas blancas.

¿Qué usos se le da actualmente al incienso?

Aunque hace muchos años (miles, de hecho), el Rey Gaspar la utilizó como regalo para el nacimiento del niño Jesús, hoy en día tiene aplicaciones diferentes y uso industrial.

Del incienso se extrae distintas resinas aromáticas vegetales que tienen uso de interés en la vida moderna.

El incienso, como tal, es un conjunto de resinas mezcla de distintas partes de plantas para uso aromático, pero no tiene nada que ver con la planta del incienso que hoy hacemos mención en este artículo.

Curiosamente os dejamos su nombre científico, ya que para nada es sencillo. Es conocida científicamente, para no generar dudas en su identificación como Plectranthus madagascariensis.

Guía de cuidados de la planta de incienso

Características climatológicas

Podemos catalogar la planta del incienso como planta de interior, adaptable a cultivo en macetas.

Por tanto, tenemos que seguir una serie de pautas muy conocidas y de sobra utilizadas en plantas adaptadas a recipientes.

Al ser una planta de interior, debemos buscar un lugar adecuado de exposición lumínica, cercana a una ventana.

No debe existir mucha variación de temperaturas entre la noche y el día, encontrándose el rango ideal entre 15 y 22 ºC.

Este abanico es especialmente cálido para el desarrollo de la planta de incienso, siendo fácilmente conseguible en el interior de casa.

Sin embargo, dependiendo de la zona donde nos encontremos y el jardín que tengamos, también es posible cultivar el incienso como planta de exterior.

Para ello, es especialmente importante cultivarla en zonas de sombra, al abrigo de plantas de mayor tamaño, que también regularán el abanico de temperaturas y reducirán el abanico de heladas.

maceta de incienso

Cómo regar la planta del incienso

Cuánto y cómo regar:

  • Cultivo al aire libre: 2 a 3 veces por semana, volumen de agua 1/5 parte del tamaño de la maceta (L).
  • Cultivo en interior de casa: 1 a 2 veces por semana, volumen de agua 1/6 parte del tamaño de la maceta (L).

En invierno, reduciremos el riego a la mitad prácticamente, con menor volumen de agua, pero siempre comprobando la humedad en el sustrato (en caso de que se cultive la planta del incienso en macetas) con los dedos.

Una pauta interesante a cumplir en este tipo de planta es el aporte de agua. Hay que ser frecuentes y constantes, pero sin pasarnos.

El exceso de humedad en el incienso genera pudrición de raíces y aumenta la probabilidad de ser atacada por hongos que no tienen curación, como Phythopthora.

Cuando tenemos el incienso como planta de interior, cultivada en macetas, es importante mantener el sustrato en un estado moderado de humedad ligera.

Para controlar la humedad perfecta en una maceta, lo ideal es introducir la yema del dedo al menos a 2 cm de profundidad. Con ello, sabremos la humedad real en contacto con las raíces, que normalmente difiere bastante de la humedad de la superficie, que suele secarse con más rapidez y nos da señales falsas de volver a regar.

Características de suelo y abonado del incienso

A la hora de preparar el cultivo en macetas, al cultivo del incienso le va una mezcla de turba comercial (que podremos adquirir en cualquier centro de jardinería) y arena.

Si no encuentras arena o piensas que no es la mejor solución para el interior de casa, puedes sustituirla por otros componentes de excelente drenaje, como fibra de coco o vermiculita.

Con ello mantendremos unos niveles de humedad ideales, sin generar encharcamientos gracias a la alta capacidad de drenaje de la arena. Por supuesto, siempre debemos contar con bastantes agujeros en el fondo de la maceta que permitan la salida del excedente de agua.

Cuándo abonar la planta del incienso: dejar descansar sin nutrientes en otoño e invierno, aportando fertilizantes desde finales de invierno hasta finales de verano.

Cantidad recomendada: 10-20 gramos de abono sólido (gránulos) cada 30 días. Si se trata de abono líquido, 1 riego a la semana en primavera y verano con una dosis de 1-2 ml/L de agua de riego (consultar etiqueta fabricante).

Como fertilizante sólido, recomendamos una mezcla muy equilibrada que funciona perfectamente para todo tipo de planta de interior. Una mezcla NPK 12-8-16 con micronutrientes, siempre con más contenido en potasio que nitrógeno y la mitad de fósforo.

¿Se puede multiplicar el incienso?

A la hora de reproducir plantas idénticas de incienso para multiplicarlas en macetas tenemos varias opciones.

Por el precio actual en viveros y centros de jardinería, si no queremos complicarnos, lo ideal es comprar plantas o plantones de incienso.

Para ello, comprobaremos que las hojas no presentan daños por insectos, roces o carencias de nutrientes, que las raíces están sanas y que el tronco está terso y sin presencias de agujeros.

Si queremos multiplicarla por nuestros medios, la forma ideal de multiplicación del incienso es mediante esqueje.

Para ello, en primavera, cogeremos un tallo de máximo 10 centímetros, dejando sólo 1 o 2 hojas verdaderas en la parte superior.

Lo pondremos los primeros 3 días en agua para generar nuevas raíces blancas y, posteriormente, lo trasplantaremos a un sustrato mitad arena y turba, con una humedad suficiente de manera constante.

Reproducirlo por esqueje no es complicado y es rápido cogerle el truquillo para esta y otras plantas.

Cuidados extras de mantenimiento

No hay muchas tareas extras que hacerle al cultivo del incienso.

Según vayan desarrollándose los tallos, es posible que aparezcan hojas secas o dañadas que podremos eliminar, directamente desde el tallo.

De esta forma reubicaremos los recursos energéticos de la planta y evitaremos la propagación de enfermedades.

El incienso es una planta de desarrollo rápido, especialmente en primavera, por lo que no tengas miedo en eliminar tallos que aparentemente sobran.

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